Siempre es bueno recordar que una recuperación saludable este años y aún más una economía sana en el futuro no puede medirse simplemente basándose en las cifras de empleo, porque no todos los empleos producen riqueza. En realidad hay buenos y malos trabajos. Los trabajos buenos generan riqueza y suman a la capacidad productiva de la economía, mientras que lo malos no.
Durante años, la Unión Soviética informaba con orgullo tasas cero de desempleo. Perdida en esta cifra estaban quienes estaban empleados para hacer el equivalente a cavar hoyos, seguidos por otros pagados para hacer el equivalente a rellenarlos.
Ludwig von Mises analizó este fenómeno en su clásico “El Socialismo”: “La política intervencionista ofrece a miles y miles de personas trabajos seguros, plácidos y no demasiado exigentes a expensas del resto de la sociedad”. Murray Rothbard extendió más tarde esta línea de pensamiento separando a los pagadores netos de impuestos y consumidores netos de impuestos”
Extracto del artículo de Christopher Westley “El desastre de los empleos en Estados Unidos.”
Durante años, la Unión Soviética informaba con orgullo tasas cero de desempleo. Perdida en esta cifra estaban quienes estaban empleados para hacer el equivalente a cavar hoyos, seguidos por otros pagados para hacer el equivalente a rellenarlos.
Ludwig von Mises analizó este fenómeno en su clásico “El Socialismo”: “La política intervencionista ofrece a miles y miles de personas trabajos seguros, plácidos y no demasiado exigentes a expensas del resto de la sociedad”. Murray Rothbard extendió más tarde esta línea de pensamiento separando a los pagadores netos de impuestos y consumidores netos de impuestos”
Extracto del artículo de Christopher Westley “El desastre de los empleos en Estados Unidos.”
5 comentarios:
Totalmente de acuerdo con su entrada. Yo ya estoy un poco harto de ver tantos carteles de esos del PLAN E en Madrid. Nos están fastidiando nuestros espacios verdes para emplear a miles de personas que consumen mucho más de lo que aportan y que deberían regresar en muchos casos a su país. Les hace un flaco favor a ellos (porque es un insulto a la inteligencia) y a los españoles y ciudadanos que tenemos que soportar más y más zanjas y ruidos.
Otra cosa no se podía esperar de ZP.
Alfredo, no creo que el problema deba centrarse en los inmigrantes. Como canario puedo decirte que estoy aquí gracias a que un día, a mis abuelos, un país sudamericano les dio una oportunidad y un trabajo y por ello no se murieron de hambre en Canarias. No debemos olvidar el pasado. En los trabajos del Plan E habrá inmigrantes y españoles y evidentemente para es un beneficio para todos ellos. El tema está en no ver los trabajos que no se han creado al habernos quitado 8.000 millones de nuestros bolsillos. Quizás tenga una acera inmaculada en mi barrio, pero lo que a lo mejor necesitaba era un arreglo en mi baño y eso era lo prioritario para mí. Además, como comentaba, la empresa de reformas se ha quedado sin poder hacer esa obra. Como siempre el Estado decidiendo en mi lugar.
Un saludo.
Además de que los autónomos siguen sin cobrar de las distintas Administraciones Públicas, eso sí que es intolerable.
Lo de no pagar a los autónomos o a las empresas es una muestra más de que son ellos lo que deciden qué está bien y qué está mal. Es como dedicarse a hacerle la manicura a un enfermo, en lugar de atenderle la gangrena que tiene en una pierna. Y al final, ya verás que encontraran la forma de explicar que ellos no han tenido la culpa.
Es que lo de los autónomos es de traca: los ayuntamientos los contrataron durante años para hacer arreglillos pero los pagos llegaban tarde, mal o nunca (tal cual lo escribo). Es decir, los ayuntamientos compraban servicios que no pagaban...
Y menos que van a pagar ahora, que están endeudados hasta las cejas, todo por querer agradar a la ciudadanía a base de obras e inauguraciones.
En mi opinión los ayuntamientos están, por lo general, sobrecargados de alcaldes y concejales sinvergüenzas que son responsables de la destrucción de centenares de pequeñas empresas antes y después del estallido de la crisis. Aún recuerdo el "puñao" de pagarés impagados por los aytos de la última empresa en que trabajé, o la experiencia del mecánico de la empresa, que había montado la suya años antes pero debido al impago de un ayuntamiento tuvo que cerrar.
Un saludo
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